En marzo de 1867 el Congreso de los Estados Unidos encargó a la asociación Lincoln Monument la construcción de un monumento para Abraham Lincoln. Se avanzó poco en el proyecto hasta que se decidió la ubicación en 1901, en una zona pantanosa. El Congreso autorizó formalmente la construcción del monumento en 1911, y la primera piedra no se puso hasta el día del cumpleaños de Lincoln, el 12 de febrero de 1914. El monumento fue inaugurado por Warren G. Harding el 30 de mayo de 1922, y contó con la presencia del único hijo vivo del antiguo presidente, Robert Todd Lincoln.
El edificio adopta la forma clásica de los templos dóricos griegos, alejándose del típico estilo triunfalista romano que predomina en Washington. Tiene 36 columnas, con un tamaño de 30 pies de altura y rodean completamente una cella o naos que se eleva por encima del pórtico. Después de construirse, se pensó que quizás las 36 columnas podrían representar los 36 estados de la época de la muerte de Lincoln, así que se grabó los nombres en el entablamento de cada columna. Los nombres de los 48 estados cuando el monumento se acabó están grabados en las paredes exteriores del ático, y unas placas conmemorativas se añadieron con posterioridad para Alaska y Hawaii.
Algunos han afirmado, erróneamente, de que la cara de Robert E. Lee está tallada en la parte de atrás de la cabeza de Lincoln, mirando hacia atrás a través del río Potomac hacia la casa monumento Custis-Lee en el Cementerio Nacional de Arlington.
Otra leyenda popular es que Lincoln se muestra utilizando la lengua de signos para representar a sus iniciales, con la mano izquierda forma una "A" y con su mano derecha forma una "L". El Servicio de Parques Nacionales niega ambas historias, son leyendas urbanas.
Sin embargo, el historiador Gerald Prokopowicz escribe que, si bien no está claro que el escultor Daniel Chester French usara la lengua de signos de sus versiones iniciales, es posible que Chester French no tuviera la intención, ya que estaba familiarizado con la lengua de signos americana, y además hubiera tenido una razón para hacerlo, para rendir homenaje al Lincoln por haber firmado la legislación federal que Universidad Gallaudet, una universidad para sordos, y la autoridad para otorgar títulos universitarios.
La National Geographic Society en la publicación, Identificar el pasado en Washington DC afirma que Daniel Chester French tuvo un hijo que era sordo y que el escultor estaba familiarizado con la lengua de signos.